Blogia
Walter andres tejada™

¿Por qué elegimos pareja?

pareja

Casi todas las personas elegimos pareja, pero no sabemos porque. Una regla está clara: Cuanto peor emocionalmente está alguien más exige a su pareja. Cuanto mejor está alguien emocionalmente menos exige a su pareja.

Es decir, alguien que tiene montones de hobbies, amigos y entretenimientos mucho menos va exigir a su pareja que un tío que se pasa el día chateando o jugando con el PC sin que ello le anime o sea súper productivo para él.

Cuanto más te aburres más reclamas a tu pareja. Cuanto menos te aburres menos reclamas a tu pareja. Entonces… ¿Por qué tenemos pareja?

Nuestra pareja satisface nuestras carencias emocionales

En realidad tú no estás con tu pareja porque sientas amor por él o lo quieras, sino porque quieres las emociones y sensaciones que sientes cuando estás a su lado. Esto se transforma cuando hay continuas discusiones y peleas ya que a menos que te vayan las montañas rusas emocionales, las discusiones acarrearán que: Estar contigo = sensaciones negativas.

Por lo tanto tu pareja ya no sentirá amor y ganas de estar contigo porque ya no siente buenas sensaciones a tu lado, sentirá malas sensaciones. Eso es el principio de la ruptura de una pareja y lo que más lo propicia son los ya tan conocidos: celos, los mal entendimientos, los objetivos y carácteres muy diferentes.

¿Suena paradógico verdad? Mi compañero de piso me dijo ayer: “Tú no quieres a tu pareja, realmente lo que quieres son las sensaciones que ella te hace sentir”.

¿Cómo se consiguen las buenas sensaciones que te hace sentir tu pareja?

Normalmente tu pareja te hace sentir sensaciones como:

  • Estar a gusto
  • Relajado
  • Contento
  • Cursi
  • Excitado
  • Apoyo

Algunas personas solo buscan algunas de estas cualidades, muchos buscan cualidades diferentes. Así que las buenas sensaciones se consiguen haciendo que nuestra pareja nos haga sentir aquello que queremos y lo hacemos de forma inconsciente. Cuando queremos sentirnos apoyados, contentos, estar a gusto con nuestra pareja lo que haremos será bromear con ella y exigirle apoyo tanto verbal como no-verbalmente. También nos gustará estar relejados junto a ella.

Y si nuestra pareja quiere sentirse cursi, excitado y contenta a tu lado, lo que hará es provocar situaciones románticas, hacer mucho el amor y bromear mucho contigo. Eso le hará creer que te quiere a ti, pero no, ella quiere las sensaciones que tiene estando a tu lado. Está enamorada de las sensaciones que le haces sentir, no de ti.

Siempre perseguimos el bien común

Es así de cruel, pero todos somos así. Quién dedica su vida a ayudar a los demás lo hace porque siente muy buenas sensaciones haciéndo lo más que puede por ayudar a los demás. Es decir, no ayuda a los demás, en realidad se ayuda a si mismo.

Aunque está claro que ayudar a los demás es más productivo que ser un egoísta sin escrúpulos. Los dos son egoístas, pero el primero hace muchísimo más bien.

Lo mismo ocurre con una pareja, realmente no lo queremos a ella/él, lo que nos gusta es lo que nos hace sentir y realmente muchas cosas nos pueden hacer sentir cosas parecidas.

Cuando te das cuenta de todo este tipo de cosas te das cuenta de que eres víctima de las circunstancias.

vida¿Realmente controlamos algo de nuestra vida?

Es lo que me planteo muchas veces. Yo no eligo mi cuerpo, me lo han dado. Pienso y actúo porque mi cuerpo me lo permite. Busco siempre lo mejor para mí y aunque esto tenga que ver con ayudar a los demás, sigo siendo egoísta porque lo hago porque siento buenas sensaciones.

Mis genes, mi cuerpo, están programados para ayudar, los de otra persona para hacer riquezas. ¿Realmente controlamos algo? Cada vez veo que somos más las piezas de un puzzle que ya ha sido conducido, de un juego dónde ni pinchamos ni cortamos.

Los humanos somos así y actúamos como actúamos no porque queramos, sino porque nuestros genes, carácter y personalidad nos ordenan actuar así. Creemos que lo hacemos libremente pero no es así.

Pongamos un ejemplo. Yo escribo porque me encanta escribir, siento muy buenas sensaciones al escribir porque mis genes están programados para sentirse muy bien cuando yo escribo. Pero si yo ahora quiero empezar a hacer algo que no me gusta absolutamente nada, no podré porque no siento buenas senaciones al hacerlo.

Yo lo intento, pruebo todo y me gusta casi todo y eso me da mucha más libertad porque no soy tan víctima de las circunstancias. Me gusta innovar, idear, hablar en público, todo tipo de películas y de música. Siempre intento ser lo más moldeable y flexible para modificar mi personalida, caracter, mis genes y poder ser realmente libre en este juego del universo.

Pero la mayoría de la gente no es así. Actúan obedeciendo completamente a sus genes. Por lo tanto no tienen ninguna libertad. Algunas de estas personas actúan así:

  • Solo les gusta determinado tipo de música
  • No les gusta…
  • No comen de todo

etc.

En cuanto algo no te gusta, estás siendo un esclavo. Tus genes, tu cuerpo, te hace sentir malas sensaciones ante algo y tu en vez de luchar contra ellas para ser libre lo que haces es obedecer. “No me gustan los spagettis, pues nunca como spaguettis”. “no me gusta la música House”. Cuando haces algo o no te gusta algo es así por el cuerpo que se te ha dado y cuando te privas de cosas es que no eres libre, simplemente obedeces.

¿Cómo no ser un esclavo?

La cosa es fácil: Debe gustarte todo, mientras no sea inmoral. En cuanto no eres creativo, no sabes dibujar, pintar, escribir, no comes de todo, no te atreves a hacer deporte… Estás siendo esclavo de tu cuerpo.

Pero si empiezas a correr y hacer que te guste cuando antes lo odiabas, ahí es cuando empieza a ser realmente libre. Porque ni tus genes ni tus gustos te controlan, tu controlas lo que quieres y lo que no.

0 comentarios