A descansar la mente y sólo utilizarla para la inspiración y la intuición.
Cuando sientas el cansancio de la mente es la señal de que no es el camino correcto.
Como consecuencia del descanso mental, surgirá también la necesidad de la limpieza emocional, que ya se ha desarrollado a lo largo de tu vida, pero como el dobladillo de un vestido requiere aún algunos ajustes.
No mires la "toxina emocional" como algo tóxico sino como algo a transmutar. Como si se sacudiera algo… como una limpieza: Aceptar, dar las gracias y elegir otra cosa. Hacer caso omiso de estas emociones no hace más que nublar la percepción, ya que coloca cristales viejos en ventanas nuevas.
No resistas a la fuerza antagónica que pueda surgir en cualquier comienzo. Ir por arriba de la ola y como si fueras cabalgando... saltando los obstáculos. No resistencia. De esta manera no caerás en la fragilidad de la ingenuidad, y en vez de que la fuerza te detenga, te empuja en el avance... y detrás de ese empuje surgirán los resultados.
Que todas las creencias antiguas no te pesen. Eres nueva a cada segundo y puedes elegir a cada instante.
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